Deuda descomunal, competencia en todos los mercados, devaluaciones en latinoamérica, fusiones de grandes operadoras en USA y Europa dejando a timofónica cada vez más sola y más débil. Pero tranquilos que Pallete volverá a decir que está infravalorada. Eso sí, hacer no hará nada. Necesita un golpe de timón para que se produzcan compras. El año pasado, por mayo, llegó a la resistencia de los 10,50 y la zurraron pero bien y este año ha vuelto a pasar lo mismo, llegada a 8,50 y para abajo.