Colonial pelea por volver al Ibex como socimi nueve años después de salir
Cumple los requisitos para volver en la revisión del próximo 7 de junio
OHL mueve dinero suficiente para regresar pero no tiene el tamaño mínimo
En solo un año y medio, el Ibex 35 puede pasar de no tener ninguna firma del sector inmobiliario entre sus componentes a contar con dos representantes. Merlin Properties se incorporó al índice en diciembre de 2015, convirtiéndose en la primera empresa del sector desde la salida de Inmobiliaria Colonial en abril de 2008. Ahora es precisamente esta última la que reúne de nuevo todos los requisitos para regresar al Ibex nueve años después. Los valores que se juegan el puesto son Viscofan e Indra.
Los cuidadores del índice lo revisarán el próximo 7 de junio, después de no realizar ningún cambio en la reunión de marzo -son las de junio y diciembre las que intentan reservar para anunciar variaciones-. Sin embargo, Colonial ya era candidata para entrar el trimestre pasado y en los últimos meses ha reforzado su posición.
La inmobiliaria presidida por Juan José Brugera se sitúa entre los 35 valores más líquidos del parqué español en los últimos seis meses, si se mira únicamente el volumen de negociación. Los títulos de Colonial negociaron una media de 9,3 millones de euros al día desde principios de diciembre de 2016, por encima del dinero que movieron tres empresas que ahora forman parte del Ibex: Meliá, Indra y Viscofan. En marzo, era Meliá la peor situada por volumen de negociación, pero ahora es Viscofan, en la posición 39, la que corre más riesgos de ceder su plaza.
La liquidez es la principal característica que estudia el comité encargado de velar por la composición del Ibex. Pero para entrar es preciso cumplir un requisito de tamaño. La capitalización, ajustada por un coeficiente según el capital que circule libremente en bolsa, media de una empresa en el último semestre debe equivaler al menos a un 0,3% de la media de todo el Ibex. Una criba que pasa Colonial y que, en cambio, deja fuera a otra de las candidatas por volumen, OHL -se sitúa en el puesto 33-. La constructora mueve dinero suficiente para regresar tras salir el pasado junio, pero su capitalización no llega al mínimo.
Entre las nuevas cotizadas que han debutado este año en la bolsa española, solo Gestamp cuenta con un tamaño, ajustado al free float (el capital que se intercambia en bolsa), que pueda abrirle las puertas al Ibex en un futuro. Aunque solo lleva un mes y medio en mercado, no se colocaría entre los 35 títulos más líquidos por el volumen medio diario negociado en los últimos 20 días, según los datos de Bloomberg, sino en torno al puesto 40.
El antes y el después
El posible regreso de Colonial llegaría en un momento de transformación para la compañía, que acaba de anunciar su intención de convertirse en una socimi, a falta de aprobarlo en junta el 29 de junio. Este régimen fiscal destaparía unas ganancias de 72 millones extra este año, al revertir provisiones, y le habría permitido, según explica la firma, elevar su beneficio en 100 millones de euros en 2016, hasta los 374 millones de euros.
En estos nueve años fuera del Ibex, Colonial ha logrado recomponer su tamaño gracias a numerosas ampliaciones de capital. Ahora cotiza por encima de los 2.800 millones de euros, después de caer a 145 millones durante la crisis, en 2012, y tras ser una firma que llegó a valer más de 8.200 millones en 2006, antes de estallar la crisis.