Autor Tema: Fidelity: “El peligro es que la renta variable de EE.UU. tenga un año demasiado  (Leído 1539 veces)

romano

  • Hero Member
  • *****
  • Mensajes: 514
  • Karma: 12
Fidelity: “El peligro es que la renta variable de EE.UU. tenga un año demasiado bueno”


     ¿Pueden los “toros” seguir manteniendo en Wall Street el impulso  alcista de los últimos cinco años? Esta pregunta está rondando cada vez a  más inversores, y las gestoras internacionales están saliendo al paso.  El último en pronunciarse al respecto ha sido Dominic Rossi, director mundial de inversiones en renta variable de Fidelity Worldwide Investment, y su respuesta es “un sí rotundo”. “Creo que la fortaleza y duración de la reactivación en Estados Unidos sorprenderán a los inversores”, ha añadido. A continuación, Rossi expone sus razones, no sin antes afirmar: “Un retorno del culto a las acciones puede propiciar un mercado alcista plurianual en la renta variable”.

El experto va más lejos, al afirmar que “el mercado estadounidense va a romper al alza con fuerza, dejando atrás su periodo actual de consolidación”.  Además, al haber caído los rendimientos en la deuda corporativa de  EE.UU. y la zona euro, cree que las acciones se postularán como una  opción atractiva a medida que se vayan publicando resultados  empresariales. “En mi opinión, el peligro es que la renta  variable estadounidense tenga un año demasiado bueno, en lugar de  demasiado malo, a la vista de las buenas perspectivas tanto de liquidez  como de beneficios”, afirma Rossi. Haciéndose eco de los resultados de análisis técnico comentados recientemente por Jeff Hochman,  director de análisis técnico de Fidelity, el director mundial de  inversiones de renta variable afirma: “A mi juicio estamos en medio de  un mercado alcista, y en un mercado alcista se compra con las caídas.  Desde esta óptica, si se produce una corrección de mediados de ciclo por  el comienzo previsto de las subidas de tipos en 2015, sería una  oportunidad de compra”. Va más lejos en su pronóstico, al calcular que el S&P 500 podría subir hasta el nivel de los 2.000-2.300 puntos.


     Los argumentos

Rossi comienza su análisis con un somero repaso a lo que han hecho las  bolsas internacionales en el primer trimestre de 2014. Destaca la  resistencia de los mercados a las malas noticias, conteniendo los  niveles de volatilidad ante eventos como la crisis ucraniana. El experto  cree que la estabilización de la volatilidad en niveles bajos se debe a  “la confianza en las positivas perspectivas a largo plazo para la  economía estadounidense”. Recuerda que cuando el índice de volatilidad  implícita VIX cae por debajo de los 20 puntos, su media a largo plazo  desde 1990, se crea un entorno favorable que propicia la expansión de  las valoraciones. “El descenso de la volatilidad era una condición indispensable para que los mercados revisaran al alza las valoraciones en 2013 (desde ese momento, la volatilidad media ha sido del 14,3).  Aunque muchos inversores se habituaron a unas cotas elevadas entre 2008  y 2012, creo que la volatilidad puede permanecer en niveles bajos  durante un periodo prolongado, como ocurrió en la década de 1990”, explica Rossi.


     El director mundial de inversiones de renta variable de Fidelity cree  que, puestos a mencionar posibles catalizadores de volatilidad, “el  ciclo de los tipos de interés se ha convertido en el punto clave”, y  recuerda que en una de las últimas reuniones del FOMC la actual  presidenta de la Reserva Federal sugirió que podrían empezar a subir  tipos seis meses después del final del tapering. Después de estas  palabras se produjo un pequeño repunte de la volatilidad que afectó  principalmente a las bolsas, pero Rossi hace notar que los treasuries no  experimentaron movimiento “lo que indica que los inversores no están en absoluto preocupados por el riesgo de inflación”,  a pesar de estar extremadamente baja, con mínimas perspectivas de un  repunte. El experto estima que “el grado de comprensión del tapering es  bueno actualmente” y piensa que la Fed mantendrá su política expansiva  porque “Yellen considera que el mercado laboral de EE.UU. todavía tiene  que mejorar”.


      El experto muestra una actitud muy positiva con respecto a la evolución  futura de la economía estadounidense, de la que afirma que “se  encuentra en un punto de inflexión”. “El mercado no está reconociendo totalmente la rapidez con que la economía estadounidense se está fortaleciendo”,  amplía. Rossi realiza esta afirmación basándose en la mejora  generalizada de los datos macro (PMIs, confianza del consumidor,  concesión de crédito…), y por ello vaticina que “el crecimiento  estadounidense va a sorprender al alza”, con tasas por encima del 3%.


      Adicionalmente, Rossi piensa que “resulta plausible que el presidente Obama cierre su mandato con superávit en las cuentas públicas”,  dada la rapidez con la que se está corrigiendo el déficit  presupuestario (se han recortado 600.000 millones de 1,5 billones desde  2009). “Nos encontraremos con una bolsa estadounidense similar a la que  vimos a finales de la década de 1990 (con el superávit presupuestario de  Clinton) y apoyada por unas buenas condiciones de liquidez”, indica el  experto. Éste recuerda que “cuando un estado tiene superávit, los  ahorros de la población fluyen hacia la bolsa, lo que impulsa las  valoraciones”, de ahí el ya citado retorno al “culto a las acciones”,  que en última instancia podría encarecer algunos sectores y mercados  bursátiles.


      Hay potencial

En cuanto a las valoraciones, a priori Rossi cree que “las bolsas ya no están baratas, pero tampoco están caras”.  El experto detecta que este año se está revirtiendo la tónica que había  venido siendo habitual hasta ahora: si en ocasiones anteriores el año  había comenzado con previsiones de beneficio elevadas y poco realistas  que después se habían corregido a la baja, este año en cambio las  expectativas de partida son bajas, y Rossi anticipa que “probablemente  tengamos una buena temporada de beneficios”.


     Sin embargo, el responsable de Fidelity adopta una postura prudente,  confrontando los argumentos a favor de  comprar acciones estadounidenses  con el argumento de que el PER de la bolsa de EE.UU. está en 16 veces,  pero como la rentabilidad empresarial está en máximos históricos,  entonces si se ajusta el PER cíclicamente por los beneficios es de 22  veces… y esto sería una señal de venta. Rossi afirma que “esta visión  peca de ingenua”, porque cree que los márgenes de beneficio pueden  seguir subiendo. “La distribución de los beneficios entre  capital y mano de obra está experimentando un cambio profundo en EE.UU. y  no veo por qué los márgenes tendrían que retornar a la media;  para que ocurriera, el peso de la mano de obra en los beneficios tendría  que aumentar y a menos que volvamos a tener una mano de obra muy  sindicalizada, lo que es improbable, los beneficios van a seguir siendo  elevados”, pronostica.


      Amén de la transformación del mercado laboral en EE.UU., Rossi aporta  otras razones para explicar por qué los márgenes pueden seguir siendo  altos: la globalización del mercado laboral, el menor grado de  organización de la mano de obra, los cambios tecnológicos y “la  capacidad de los mercados para presionar a las empresas para que se  centren en los márgenes de beneficios de una forma que hace 30 años  simplemente no existía”. La expectativa del director mundial de  inversiones de renta variable es que las perspectivas de beneficios  empresariales sigan siendo favorables y, sumadas a una liquidez amplia,  deberían propiciar un mercado alcista plurianual en Wall Street.


Fuente: http://lacartadelabolsa.com/leer/articulo/fidelity_el_peligro_es_que_la_renta_variable_de_ee.uu._tenga_un_ano_demasia
No pongan su corazón en el dinero