Este tema ha saltado a la palestra exclusivamente porque la difunta era un cargo político. El escándalo institucional y mediático se ha debido a que, en un primer momento, los partidos entendieron que podía deberse a la reacción de alguien contra "uno de los suyos" por motivos "políticos": efectos de la crisis, etc. Y es por ello, que todos corrieron a cerrar filas: para defenderse conjuntamente. Exagerando la nota lo que hiciera falta: paralización de la campaña europea y ataque a las redes sociales (siempre buscando culpables ajenos a ellos y luchando contra las críticas)
Independientemente de la opinión que me merezca (mala) el servicio público de esta señora, ya está claro que su asesinato responde a motivos criminales "comunes" como hay tantos cualquier día (por desgracia). O sea, que dejemos de hacerles el juego a los que lo magnifican para entretenernos y lograr que no hablemos de otras cosas.