El concurso de Vértice pone en la cuerda floja a Ezentis y cuestiona el papel de Piqué.
Se ha abierto la caja de los truenos. La
declaración de concurso voluntario de Vértice 360º amenaza con hacer saltar por los aires las principales operaciones llevadas a cabo por la productora en los últimos dos años, ya que este es el plazo que contempla la ley para dar vuelta atrás a operaciones. Y en esta ocasión, entran dentro de este margen la
venta de su filial de Servicios Audiovisuales (VSA) al fondo HIG, así como la cesión del
catálogo de películas.
El escándalo salpica directamente a
Ezentis, primer accionista de Vértice 360º; al presidente de la compañía,
Manuel García-Durán; y al exministro popular y nuevo consejero delegado de OHL,
Josep Piqué, quien formaba parte del consejo de administración de Ezentis cuando se cerró la venta, y que poco después se incorporó a las filas de HIG como
presidente de la filial comprada, donde ha permanecido hasta hace pocas semanas, junto a García-Durán.