Desde los máximos de abril 11800 hasta los 7800 de ahora las pérdidas en 10 meses son bestiales y el daño que está ocasionando en los ahorros de muchas familias ya es angustioso. Como las imposicones a plazo fijo es casi cero, millones de ahorradores tienen sus ahorros en fondos de inversión y planes de pensiones. Esta caída tan intensa en tan poco tiempo supone una importante pérdida de patrimonio para muchos ciudadanos. Por lo tanto la caída de la bolsa no es un problema de las grandes empresas del IBEX, es un empobrecimiento de la clase media trabajadora que ve atónita cada día como se van devaluando los ahorros de toda una vida de mucho esfuerzo y sacrificio. Además la merma patrimonial implica una reducción del gasto familiar así como menos ingresos para la hacienda pública pues cuando la bolsa sube hacemos plusvalías. En fin, a ver cuanto dura esta sangría porque, al menos para el IBEX, ya está resultando angustiosa y va a apartar para siempre a los pequeños ahorradores de la bolsa.